MITIGA ESTE PESAR

No te vayas amiga,
aún no te duermas
en ese oscuro hospital.

Aún tus hijos te esperan
en la casita humilde
de Facatativá *
allá por los valles y los cerros
donde en alegre bandada
revolotean tus nietos...
tus pasos pronto volverán.

No te vayas amiga,
aún tienes un legado que dejar.
Son tus letras
que martillan las conciencias,
son tus mensajes de luz,
tu entrega...
Levántate hermana
de aquel lecho de enferma;
en ese silencio letárgico
no te adormezcas.

Te necesita mi alma, amiga...
¿a quién le confiaré mis penas
si tú te vas?
¿no leeré más tus poemas?
¿quién me sostendrá
de su diestra
cuando mi fe ande errante?

¿Quién será vida en tu hogar?
Te necesitan tus hijos
que aunque ya mayores
andan en orfandad,
como confusos y heridos...

Amiga, regresa,
abre tus ojos a la claridad.
Nuestras confidencias
¿dónde irán?
Vuelve, vuelve...
y mitiga pronto este pesar.

INGRID ZETTERBERG

* Facatativá: Pueblito de Colombia

Dedicado a mi gran amiga,
la poetisa Myriam Buritica que 
se encuentra delicada de salud.

De mi poemario
"Amaneciendo entre lirios"

Derechos reservados
Safe Creative Cta. 1006080193112

Mi jazmín

Mi jazmín

MI JAZMÍN

2ho93xy

Quiero

que mi hija vuelva

como un jazmín

oloroso

al hogar en calma,

a compartir

conmigo en esta cena,

lo sagrado de mi mesa.

♥♥♥♥♥♥♥

Quiero

que mi hija vuelva

de lejanas tierras,

como una fragante

y encendida vela,

alumbrando mi alma

como una promesa.

cooltext325383846648025

Dedicado a mi amada hija Claudia

cuando ella aún radicaba en Estados Unidos

♥♥♥♥♥♥♥

De mi poemario

«Los girasoles eternos»

♥♥♥♥♥♥♥

Derechos reservados

Safe Creative Cta. 1006080193112

Carita sucia

Carita sucia

CARITA SUCIA

34fktg6

Pequeño mío,

carita sucia de arrabal,

¿quién transformó tu inocencia

en hambre y oscuridad?

Dime, niño de los escombros,

de las casas de tierra y paja,

¿quién despojó de ti la sonrisa

y puso ese peso en tus hombros?

Hace tiempo que te veo

cargando leña

por las calles del pueblo

encorvando tu espalda pequeña.

♥♥♥♥♥♥♥

Niño frágil,

huérfano de madre y de pan

¿cuántos días ruines has pasado

sin abrigo ni hogar?

Invierno sin ilusiones…

pies helados de orfandad,

ropas raídas al viento

llevan tu cuerpecito en soledad.

Quizás en tu mano extendida

más que unas monedas

es amor lo que mendigas

pequeño del arrabal.

signature_26

De mi poemario

«El azul de la vida»

♥♥♥♥♥♥♥

Derechos reservados

Safe Creative Cta. 1006080193112

Mi niña, corazón de Dios

Mi niña, corazón de Dios

MI NIÑA, CORAZÓN DE DIOS

1izdll

(Dueto entre las poetisas Ligia Rafaela e Ingrid Zetterberg)

Eres dulzura al mirar, ternura al reír,

eres luz que alumbra mis días

cuando en tristeza me encuentro.

Tus manitas de porcelana suavizan

el camino que tengo que andar

cuando con cariño me aprietas

mis manos para ayudarme a seguir

el sendero que me trazó Dios.(L.R.)

♥♥♥♥♥♥♥

Nieta mía, esperanza en arrullo;

ilusión del alma mía

en cada atardecer.

Te miro mientras juegas

haciendo ruiditos

con tu boca tierna;

eres la flor

que nació de mi oración;

te esperé entre ovillos

de lana y crochet,

entre lágrimas te esperé…

y llegaste

desde un mundo de burbujas

a los brazos de la abuela. (I. Z.)

♥♥♥♥♥♥♥

Mi niña, corazón de oro, que ilusión

y que ternura siento al contemplar

tu rostro virginal, eres como un arco iris

que ilumina mis otoños y pones fuerza

a mi caminar para no caer en desilusión. (L.R.)

♥♥♥♥♥♥♥

Mi dulce avecilla,

contemplo mientras duermes,

lo sonrosado de tus mejillas

y te lleno de breves besos

cuidando tu sueño.

Eres la razón de mi alegría

en estos mis años viejos.(I. Z.)

♥♥♥♥♥♥♥

Mi nietecita de ojos vivaces, mi linda niña

que nos regaló el Creador, ponle esperanza

y anhelos a mi vida para no morir de pesar.

Dios te bendiga cielo mío, abres tus brazos

como un ave acurrucándome con dulzura y amor.(L.R.)

♥♥♥♥♥♥♥

Mi amada nietecita,

quiero verte crecer

como capullo radiante

y que me ofrezcas tu brazo

cuando ya en mi ancianidad

vacilen mis pasos.

Quiero tu voz de alondra

llenando el hogar.

Y que nunca me olvides

cuando me haya ido a la eternidad.(I. Z.)

1izdll

Ingrid Zetterberg y Ligia Rafaela Gómez

♥♥♥♥♥♥♥

Derechos reservados

Safe Creative Cta. 1006080193112

¡Al fin se escuchan melodías!

Al fin se escuchan melodías

¡AL FIN SE ESCUCHAN MELODÍAS!

divis8fr6

Con una rosa escarlata

cambiaste mi gemir en danza.

Rosa de tus manos

hija amada…

Llegaste sigilosa

irrumpiendo en mis cavilaciones

poéticas…

y con el perfume

de tus jóvenes años

ungiste mi tristeza;

esparciendo brillo de escarcha

en mi sonrisa apagada.

♥♥♥♥♥♥♥

Hoy regresas a mi regazo,

al hogar en calma

con mi nieta de la mano.

Hoy las aguas azules

de tus ojos

refrescan mi alma

y llueve un trinar de aves

sobre el tejado de mi estancia.

Has iluminado

con tu presencia sutil

todos los rincones de nuestra casa.

♥♥♥♥♥♥♥

Hay movimiento, hay vida

después de tanta quietud…

¡Al fin se escuchan melodías!

llanto dulce de niña…

y tu voz en susurros

derramando amor…

mientras tu risa sonora

viaja en ecos

por nuestro tierno comedor.

♥♥♥♥♥♥♥

Regresaste 

por caminos secretos

que sólo conoce Dios;

coloreando mi soledad

con los suaves matices de tu voz!

2ch8gtg

Dedicado a mi amada hija Stephanie

De mi libro «Por los bosques del silencio»

Año 2,016

♥♥♥♥♥♥♥

Derechos reservados

Safe Creative Cta. Nro. 1006080193112

Regalo idóneo….(Prosa)

(Foto verdadera de mi Tobi)

Regalo idóneo

 2cogeo0

Padre, que desde antaño te paseas en mi dolor, ¿cómo no ibas a estar tú en este preciado jardín? En un recodo de finas hiedras, te he sembrado, con tu saludo musical, y tu sonrisa plena de ayer.

Estabas entrando a nuestra casa; ¿fue en Octubre? no lo sé….¿Fue en uno de esos veranos que agonizan esperando al otoño? quizás…

Pero llegaste junto a un sol travieso, que danzaba en las paredes, y yo tenía once años, ¿lo recuerdas?

Llegaste con la sorpresa más tierna, diciéndome entre sonrisas: -«Mete tu mano en mi saco.» – Y toda curiosa de ojos y manos, hurgué en tu bolsillo, y me topé con un montoncito de suave pelaje blanco, que dormía tibiamente ovillado. 

Nunca se irá de mi alma, este regalo que le hiciste a mis mejores años. Le puse por nombre: «Tobi», y fue la inocente compañera de mis juegos y correrías adolescentes, mi perrita blanca, como una mota entalcada y alegre, alborotó de emociones la época más pura de mi vida.  Padre, nunca te lo he dicho, pero ella nos inició en la escuela de la ternura, en el plácido hogar.

Fue el regalo más idóneo, para mi ancho corazón. Padre, hoy mi amor se nutre de aquel lejano recuerdo, y tus miradas; como las palabras que pronunciaste tan sólo ayer: -«Yo te extraño hija.»-

2ch8gtg

Prosa escrita cuando mi padre aún vivía

De mi poemario:

«Jardines de antaño»

Derechos reservados

Safe Creative Cta. 1006080193112