¿Quién es ese hombre
que me tiene enamorada?
¿De qué mundo ignoto
llegó hasta mi vida?
¿De qué luz encendida?
Él me dice que se prendó
de mi alma,
de la intensidad que hay en mí.
Pero en este hombre añorado
hay un misterio.
En él hay
una fuerza espiritual
inconcebible;
Camilo Sesto se hacía llamar,
y algo quiere revelarme
desde lejos,
algo especial
que se oculta en su mirar.
Un destello de su alma blanca,
un secreto quizás.
Yo lo espero envuelta en sombras,
y sólo su amor eterno
mi sendero alumbrará.
INGRID ZETTERBERG
Dedicado a mi amado Camilo Sesto
De mi poemario
"Tu alma y la mía"
Derechos reservados
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Etiqueta: misterio
SIN PENA NI GLORIA
¡Cuánto sufre el poeta! La vida se le va en cada verso... su alma oscila entre letra y letra, suspirando. Y quiere dejar su legado como un puñado de pétalos, para que el viento lo recoja y golpee cada puerta o penetre por las ventanas de algún amargo silencio. Y agoniza en anhelos y a veces no encuentra un alma donde abrigar sus versos. El poeta sufre cuando nadie lo entiende y no sabe porqué le fue dado ese don. Se llevará sus poemas hacia el misterio; sin pena ni gloria cruzará el sendero hacia lo desconocido, lo eterno. INGRID ZETTERBERG De mi poemario "Tu alma y la mía" Derechos reservados Safe Creative Cta. 1006080193112
¡A mis años!
¡A MIS AÑOS!
(Rima Jotabé heptadecasílabo)….Consta de 17 sílabas métricas cada verso)
No hay amor más puro que aquel que nace después de la muerte,
porque después que tú te fuiste al misterio, aprendí a quererte.
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En cada amanecer reposan mis lágrimas en tu cuello,
comunión de dos almas que se funden en algo tan bello.
Tienes el don de consolarme acariciando mi cabello
¡A mis años tanta ternura! Jamás imaginé aquello.
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Eres tan enigmático y necesario en mi sola vida
que si te perdiera no hallaría para mí la salida.
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De pie, con tu traje azul como un ángel, al fin pude verte
con esa humildad que te nace y me alumbra cual un destello,
me regalaste una rosa llena de tu luz encendida.
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INGRID ZETTERBERG
De mi poemario
«Por la ruta de la poesía clásica»
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Derechos reservados
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Lo mejor de ti….(In memorian)
LO MEJOR DE TI
Con tu dolor me quedo,
con tu sombra clara.
La profundidad de tu entrega;
tu misterio…
y tu voz quebrada.
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Esa suavidad
de tu mirada,
que ya no está.
Me quedo con tu silencio,
y tu paz.
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La delgadez de tus manos,
que juegan con el viento,
el cansancio de tu alma
con la mía difuminada
entre colores líquidos
de oro y luz magenta
que en mis sueños de plata
fluyen y me alimentan.
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Y yo te siento en la brisa
con tus bromas y caricias
que van consolando
mi sangrante herida.
Con tu alma me voy quedando;
con lo mejor de tu vida.
Dedicado al cantante Camilo Sesto
recientemente fallecido 1,946 – 2,019
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De mi poemario
«Poemas de terciopelo»
Derechos reservados
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Si tú volvieras
SI TÚ VOLVIERAS
Por si tú volvieras
amado mío,
tengo mi adoración guardada,
tengo mi danza
escondida
en mi pecho amante…
en el vibrar de mi pandero;
y mi alma dispuesta
para vivir contigo de nuevo
aquel idilio
que quedó en secreto
en el cantar del petirrojo,
que nos unió una tarde…
allá entre los maizales
de la parcela querida.
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Por si tú volvieras
te guardo en mi pecho
que clama, que llora…
y en la oración de mi boca
hay un ruego eterno
¡Vuelve amado Jesucristo!
el umbral de mi estancia
está cubierto de pétalos
que trajo el viento…
y yo espero el roce dulce
de tu Santo Espíritu…
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Perdonen amigos,
yo sé que casi nadie
comprende
este amor que sobrepasa
el misterio.
Hay más de uno que rechaza
al amor de mis amores;
aquel de quien yo espero
su pronto regreso.
De mi poemario
«Secretos de mi alma»
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Cuatro Senryus
SENRYU NRO. 16
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Agua esmeralda,
casitas junto al río
¡qué bello es Austria!
SENRYU NRO. 17
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Se oyen campanas
al alba en Rosenheim
misterio al viento
SENRYU NRO. 18
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Antiguas fuentes,
Puerta de la victoria
Münich es lindo
SENRYU NRO. 19
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Ciudad de ensueño
Salzburgo es un poema
tatuado en mí.
De mi poemario
«Tejiendo Haykus y Senryus»
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Todo acabó
TODO ACABÓ
Ya todo quedó atrás…
los bosques del mutuo amor
se han esfumado en mis sueños;
pertenecen a otra dimensión
que en tiempos remotos
solíamos visitar.
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El ángel de nuestra paz
nos llevaba de su mano
y juntos recorrimos
senderos que ya no brillan,
que se escondieron
de nuestros pasos.
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Violines olvidados
ya no emiten sus quejas.
Todo lo puebla el silencio
y el polvo de los años
ha cubierto con un manto
de misterio
los más entrañables recuerdos.
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Amarilleadas por el tiempo
están las páginas
donde mis leves manos
se posaron
para escribir de tu amor lejano.
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Puro como el cristal
era mi sentimiento…
Y cual una crisálida
se iban formando
mis azules alas
en el más hondo secreto.
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Mi amor era casto
como una diadema sin pulir,
y mi alma ansiosa
dependía del devenir
de nuestros encuentros.
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A veces era fuerte
nuestro amor…
a veces era frágil
como pétalos que desmayan
entre palabras
y silencios de dolor.
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Todo acabó…
pudo más el tiempo
que todo lo torna añejo.
Y el añorado balcón
que nunca construyeron tus manos;
pudo más la desidia
y el desamor.
De mi poemario
«El canto de la tórtola»
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La puerta vieja
LA PUERTA VIEJA
Yo he visto esa puerta
y me ha tocado el alma.
Mis dedos sedientos
de un pasado
de añoranzas,
se deslizaron
por la astillada madera.
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Ennegrecida por el tiempo,
hermosa de juventudes
que partieron.
Sus grietas
aún me hablan.
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Conmocionada me siento
por la aventura
de entrar por ella,
por los secretos guardados
detrás de su silencio.
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Alta, envejecida,
¿cuántos pasos recibió
hospitalaria?
¿cuántos versos se escribieron
detrás de su misterio?
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Su calma es estoica.
Su soledad
de antiguo roble
emana respeto.
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Puerta de pueblo,
de caras tristes
que asomaron
por las rendijas
de sus vetas soleadas.
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Hoy está sola,
y enmudece de pronto
entre gastadas paredes
de la serranía,
la puerta olvidada.
De mi poemario
«Tu luz y mis versos»
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Mis palabras
MIS PALABRAS
Mis palabras resbalan
como perfume de nardo,
sobre blancas hojas
adornadas con sellos de agua.
Son paisajes adormecidos,
difuminados…
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Mis palabras no son vigorosas
ni soberanas;
tampoco son rebuscadas.
Son sencillas y transparentes
como arroyuelos en calma…
son mariposas azuladas
que llenan la brisa
con alas de plata.
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Mis palabras son mensajeras
como robustas palomas;
son blancas y sinceras;
son aromas.
Llevan impregnada
la esencia de mi alma…
son apacibles y nostálgicas;
mis palabras no saben ser eróticas
ni bulliciosas.
Se alimentan del silencio
y de violines que cantan.
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Llevan rumores de aguas,
y traen siglos de misterio.
Mis palabras son alondras
que descendieron a mi ventana.
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No saben ser jocosas
ni mucho menos irónicas;
y carecen de formas abstractas.
Quizás no merezcan una alabanza,
pero llevan el sello de mi vida
mis humildes palabras;
y son la ofrenda aromática
que en mis versos Dios derrama.
De mi poemario
«La poesía es música»
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Breves líneas a mi amado
BREVES LÍNEAS A MI AMADO
Amado mío, déjame recordar la mañana aquella…¡cómo susurraba la lluvia, y anunciaba en su misterio que tu alma y la mía, estaban a punto de enlazarse! ¡Ah! tu mirada me venció en aquel invierno lejano…¿Cómo olvidar los rizos castaños que jugueteaban en tu nuca? ¿Cómo echar al olvido tu acento? Te observaba nervioso, inquieto, y sentía tus ojos profundos que rasgaban el velo de mis secretos.
¡Ah! juventud de dos, que se amaron a escondidas, esos éramos tú y yo…nuestras citas en aquella esquina, cada tarde, se convirtieron en mi razón de ser. Yo guardaba en mi viejo ropero algunas de tus ropas, «tus vestones» (como tú los llamabas) estaban impregnados del aroma de tu piel, ¡ah, tu fragancia! llenaba mis horas y era mi delirio, cuando me quedaba a solas.
Solía aspirar tus ropas, como quien aspira flores. Así te he amado, desde el amanecer de mis días. ¿Dónde escapó el amor de juventud? ¿Dónde se quedó el ruido de tus pasos que alborotaron mis sentidos? Tú llegabas, y había fiesta en mi faz, mis lágrimas brotaban por ti.
Han pasado 46 años desde aquella mañana santiaguina, y aún te guardo como una estampita en nuestra estancia. Con tu andar fatigado rodeas mi alma, y a Dios le pido que la vida nunca nos separe.
Dedicado a mi amado esposo – 2,017
De mi Libro
«Por los bosques del silencio»
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